Esta herramienta terapéutica permite a los pacientes simbolizar contenido verbal complejo de explicar, mediante el trabajo práctico con arena y otros elementos.
Esta técnica de lenguaje no narrativo, conocida como Bandeja de Arena, Sandplay o Sandtray, se le atribuye su creación principalmente a dos autoras, Margaret Lowenfeld y Dora Kalff, ya que, de su esfuerzo conjunto y colaboración, complementaron esta práctica.
La caja de arena combina una serie de elementos cuya función es crear un puente entre la realidad exterior de la persona y su mundo interior, todo a través de la implementación de una bandeja que contiene arena seca y húmeda, complementada con diversas figuras.
Esto funciona a través de las representaciones simbólicas y de los arquetipos, de aquellas imágenes sociales que culturalmente representan nuestro mundo, porque a través de la elección de las figuras y la utilización de arena, se puede crear una representación ficticia en la que el profesional puede comprender y trabajar la manera de relacionarse del paciente o determinados obstáculos que pueden dificultar la vida a las personas.
Esta técnica permite apreciar:
Al pensar en una caja con arena y en figuras para colocar en ella, inmediatamente asociamos la acción de niños haciéndolo. Sin embargo, el carácter terapéutico y expresivo de esta técnica es aplicable para cualquier persona, independientemente de su edad o cualquier tipo de característica.
La edad de uso abarca cualquier persona, cualquier problema o cualquier necesidad que haya que trabajar, se adapta a todo el mundo por su facilidad y versatilidad.
Por otro lado, el rol del profesional es observar con detención, sin dirigir la escena, ni juzgar lo que va viendo. La interpretación de la caja de arena se hará posteriormente tras escuchar al paciente, cuando éste relate su construcción. Al final del proceso, se recomienda fotografiar el trabajo para posteriormente analizar todo detalle.
De acuerdo con un artículo publicado por la Asociación de Psicología Analítica de Colombia (ADEPAC), el cual fue supervisado por el terapeuta Martin Kalff (hijo de Dora Kalff), es necesario que se reúnan diversas consideraciones en la aplicación de esta terapia con arena. Principalmente, el texto hace hincapié en tener en cuenta el contexto externo del paciente, así como la historia clínica de la persona.
Por otro lado, también los expertos aconsejan lo siguiente:
Esta innovadora práctica se ha convertido en un canal sencillo y efectivo, por el cual las personas a través de símbolos, logran dar forma a profundas y complejas experiencias. Sin embargo, es esencial que los profesionales a cargo cuenten con las competencias para poder contribuir a la mejora de cualquier tipo de problema.
El trastorno de personalidad narcisista se caracteriza por un patrón general de grandiosidad (grandeza), necesidad de adulación y falta de empatía.
Existen distintos métodos y herramientas que resultan útiles para la obtención de información respecto a las aptitudes y habilidades de un postulante. La selección de personal, por lo tanto, tiene el objetivo de beneficiar a ambas partes de este proceso.
Este instrumento aporta valiosa información para el diagnóstico de Trastorno del Espectro Autista. Sin embargo, los resultados deben ser complementados con la visión de un equipo interdisciplinario.