La relevancia de la estimulación cognitiva en niños y niñas
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[7:36] “El concepto de mentalización, yo creo que está un poco mal traducido, ya que primero se tradujo como “mentalization” y luego lo cambiaron a “mentalizing”, como para manifestar que esto es un verbo, no sustantivo o una cosa que existe, más bien es una cosa que se hace y entonces se definiría como; “es una forma de actividad mental imaginativa acerca de los otros y de uno mismo”.
[10:40] “Y se trata de interpretar el comportamiento, es decir, percibir e interpretar el comportamiento humano, si bien a veces nuestro cerebro está tan acostumbrado a hacer lo que adscribimos comportamientos a los animales o las plantas, o incluso a los dibujos animados, es interpretar ese comportamiento propio y ajeno como determinado por estados mentales intencionales, quiere decir, que todo lo que uno haga o vea que alguien hace está basado en un estado mental“.
“Esto cruza las relaciones humanas en general y no solamente tiene que ver con el saber si el profesor de una clase efectivamente boto el scotch a propósito o lo hizo accidentalmente; lo hacemos a propósito, pero podemos explicarlo o sea, no es totalmente consciente tampoco, si bien es un concepto psicoanalítico podríamos ubicar la mentalización o el mentalizar como una actividad más bien preconsciente, es decir que hacemos automáticamente, pero apenas nuestra consciencia es llevada a pensar en ello lo logramos hacer y esto es súper importante porque lo que nosotros hacemos con los pacientes en general es enseñarles a mentalizar, a poner esos ojos, esa consciencia, en cómo es que ellos interpretan el mundo, sobre todo el mundo social, que es el mundo más complejo de interpretar y aquel que tiene más consecuencias en la vida de todos nosotros y en la psicopatología”.
[15:26] “La mentalización tiene la gracia y es que sucede con dos conceptos o teorías psicoanalíticas importantes, que es la teoría del apego y la teoría de la mentalización, que tienen una ala empírica, es decir, se basan en evidencia, tienen mucha teorización, mucha observación clínica, pero también uno es capaz por ejemplo de encontrar cuáles son los centros del cerebro que hacen esta tarea, la tarea de imaginar y hacer sentido al comportamiento propio o ajeno como pensando en que están basados en estados mentales. Está localizado primariamente en la corteza prefrontal, pero en general mucho de lo que nosotros hacemos en cuanto a mentalizar y en cuanto a automatismo de la mentalización viene más bien del sistema límbico, es decir, de la amígdala, del centro de las emociones y como lo que hace la corteza prefrontal en general, es darle una cierta coherencia a estos impulsos emocionales y por ejemplo, cambiar el objetivo, o retrasarlas, etc. Pensar en otro o pensar en uno mismo, utilizan las mismas partes del cerebro. La mente es una construcción social, es decir, cuando yo pienso en mí, yo estoy utilizando las mismas partes del cerebro con los que pienso en otra persona y además estoy utilizando un poco la misma estrategia; la mente propia no es transparente, uno a veces no sabe por qué hace las cosas sobre todo los pacientes, pero si sabemos que están basados en algún estado que no conocemos bien, etc”.
[19:20] “Ahora, la mentalización es algo que estamos haciendo todo el tiempo, pero hay momentos en que lo hacemos mal y aquí no estoy necesariamente hablando de psicopatologías, si bien psicopatología se va a tratar de cuando se hace mal constantemente o en algún área en particular de la vida esa persona es incapaz de pensar de manera más o menos aceptada acerca de la propia mente y de la mente de los demás. Y cómo es que esta capacidad deja de funcionar bien? ¿Por qué? Deja de funcionar bien cuando nosotros tenemos una emoción fuerte, cuando el estímulo emocional bloquea la capacidad de pensar, de imaginar bien”.
[21:40] “Cuando uno siente entonces emociones fuertes, sobre todo cuando se activa lo que se llama el sistema de apego que es el sistema que nos da una forma de relacionarse con la gente que tiene que ver con lo que pasa cuando yo siento angustia o miedo, en ese sentido esa activación del sistema de apego siempre cursa con una mentalización disminuida nunca desaparece 100%. Podríamos hablar de un autismo muy profundo donde tal vez no haya mentalización, siempre hay, pero a veces se hace mal o se hace menos, más lentamente, por lo tanto, la activación del sistema de apego implica que hay estrés emocional, en general tiene que ver con que hace uno con la angustia el sistema de apego, una cosa es que lo normal sea ir a buscar a alguien en quien uno confía y te pueda ayudar y esto sucede mucho cuando eres bebé y que la presencia de ese otro, con su ayuda nos logramos calmar. Ahora, cuando nosotros nos hacemos adultos, internalizamos a esa persona, a esa madre, a esa figura de apego y después somos capaces de autoayudarnos y más que autoayudarnos es autorregular nuestras emociones.”
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